Al menos 278,000 migrantes pidieron en los puertos de entrada de Estados Unidos la cita para acceder al asilo político entre enero y septiembre, a través de la aplicación CPB One, informó este sábado la Oficina de Aduanas y Control Fronterizo.

La agencia indicó que solo en el mes pasado alrededor de 43,000 personas recurrieron a ese programa para ingresar de forma legal a territorio estadounidense.

210,000 migrantes arrestados

También indicó que, en septiembre, las autoridades del país detuvieron a 210,000 migrantes en la frontera sur, por lo que los arrestos aumentaron por tercer mes consecutivo.

La Oficina de Aduanas y Control Fronterizo publicó los datos correspondientes al año fiscal 2023, comprendido entre octubre de 2022 hasta septiembre de 2023. Señalan, además, que un total de 2,045 millones de personas fueron aprehendidas en la frontera con México.

Este año se convierte, con esa cifra, en el segundo con la mayor cantidad de arrestos en la frontera sur desde 1925. Solo lo supera el año 2022, cuando las autoridades detuvieron a 2,2 millones de extranjeros.

Troy Miller, comisionado interino de la Oficina de Aduanas y Control Fronterizo, dijo que la agencia aumentó sus recursos y personal para responder a las altas tasas de detenciones en toda la frontera suroeste. Indicó asimismo que está colaborando con aliados, dentro y fuera de Estados Unidos, para atender la “migración histórica” en el continente.

Casi 55,000 venezolanos detenidos

Puntualizó que en septiembre fueron aprehendidos 54,833 venezolanos, lo que representa un incremento de 148% comparado con agosto. Se trata de la cantidad más alta de arrestos de ciudadanos procedentes de Venezuela en el último año.

La agencia detuvo, en segundo lugar, a personas de nacionalidad mexicana. Seguidos de guatemaltecos, con 33,669, y hondureños, con 23,505.

Las cifras de arrestos en la frontera se dan a conocer dos semanas después de que Estados Unidos anunció la reanudación de los vuelos de deportación de migrantes hacia Venezuela, señaló EFE. A su vez, reflejan que las restricciones impuestas en mayo por el gobierno de Biden no han logrado parar la migración