A lo largo del fin de semana han ido conociéndose más detalles acerca de la trágica muerte de la directora de fotografía Halyna Hutchins en el set de rodaje de la película “Rust” en Nuevo México, cuando el revólver del actor Alec Baldwin, que estaba practicando cómo sacarlo y meterlo de la funda, se disparó de forma inesperada.
Varios operadores de cámara habían renunciado a sus puestos de trabajo apenas unas horas antes debido a las malas condiciones laborales, según afirma el periódico Los Ángeles Times, y entre el equipo reinaba aparentemente un ambiente de preocupación por el incumplimiento del protocolo de seguridad en lo relativo al manejo de armas de fuego después de que se produjeran dos descargas accidentales con pistolas que no deberían haber estado cargadas.
También se ha comentado que la falta de experiencia de las personas que supervisaban el armamento podría haber jugado un papel clave en el accidente que ha estremecido a Hollywood. Ahora el padre de la fallecida Halyna Hutchins ha reclamado que se busque a los responsables de lo ocurrido entre los armeros del filme, porque él tiene muy claro que la culpa no recae sobre Alec Baldwin, a quien un asistente de dirección le había dicho que el arma era segura.
Por el momento, Baldwin ha cancelado todos sus proyectos profesionales y se ha mantenido en contacto constante con la familia de su fallecida compañera de trabajo. El sábado se reunió en un hotel de Santa Fe con el esposo y el hijo de nueve años de Halyna, y fue visto abrazándolos a ambos mientras rompía a llorar.