La Agencia Antidrogas de los Estados Unidos (DEA por sus siglas en inglés) reveló su top ten de los fugitivos más buscados, el cual encabezan cuatro narcotraficantes mexicanos de los dos cárteles más peligrosos. Rafael Caro Quintero, fundador del extinto Cártel de Guadalajara; Ismael “Mayo” Zambada, uno de los líderes del Cártel de Sinaloa (CDS); Nemesio Oseguera Cervantes, alias el Mencho, jefe del Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG); y Jesús Alfredo Guzmán Salazar, apodado el Alfredillo, hijo del capo Joaquín “el Chapo” Guzmán.
Caro Quintero ha estado en la mira de la justicia estadounidense desde la década de los 80 por el asesinato de Enrique “Kiki” Camarena, un agente encubierto de la DEA en México. A pesar de que Rafael Caro Quintero estuvo 30 años en prisión, un juez mexicano lo dejó en libertad, luego el fallo fue revocado y ahora este narcotraficante está prófugo. Por él se ofrece una recompensa de 20 millones de dólares.
En el caso de Ismael “el Mayo” Zambada, este nunca ha estado preso, ni en México ni en Estados Unidos, pero a sus 73 años de edad, sigue siendo considerado uno de los narcotraficantes más peligrosos del mundo.
Nemesio Oseguera Cervantes, el Mencho, es el líder del Cártel Jalisco Nueva Generación, tiene presencia en Estados Unidos y Canadá; además es la competencia más fuerte del Cártel de Sinaloa, el que fundó el Chapo Guzmán. La recompensa por el Mencho es de 10 millones de dólares.
Finalmente, en la lista negra de la DEA aparece Jesús Alfredo Guzmán Salazar, alias el Alfredillo, hijo del Chapo Guzmán, por el que los Estados Unidos daría 5 millones de dólares. Es el único “narcojunior” o narco milenial en este top ten.