Un incendio en un depósito de municiones en Rusia obligó a evacuar dos poblados cerca de la frontera con Ucrania, indicó un funcionario el viernes, mientras que se reportó que dos civiles resultaron heridos por proyectiles rusos cerca de la planta nucleoeléctrica de Zaporiyia, en el sur de Ucrania, donde ambos bandos se culpan uno a otro de lanzar ataques.

El incendio del jueves por la noche afectó el almacén de municiones cerca del poblado de Timonovo, en la región rusa de Belgorod, en la frontera nororiental de Ucrania. Unas 1.100 personas viven en Timonovo y en la localidad de Soloti, a unos 25 kilómetros (15 millas) de la frontera. Nadie resultó herido, dijo Vyacheslav Gladkov, gobernador regional de Belgorod.

El fuego ardió días después de que otro depósito de municiones estallara en la península de Crimea, un territorio junto al Mar Muerto que Moscú se anexó en 2014.

La semana pasada se reportó que nueve cazas rusos fueron destruidos en una base aérea en Crimea, lo que demostró la vulnerabilidad de los rusos y la capacidad de los ucranianos de atacar sitios detrás de las líneas enemigas.

Las autoridades ucranianas no se han adjudicado la responsabilidad públicamente. Pero el presidente Volodymyr Zelenskyy aludió a ataques ucranianos más allá de las líneas enemigas después de las explosiones en Crimea, que Rusia dice se debieron a “sabotaje”.

El viceministro de Relaciones Exteriores ruso, Sergei Ryabkov, dijo el viernes que las declaraciones de funcionarios ucranianos acerca de atacar instalaciones en Crimea representan “una escalada del conflicto alentada abiertamente por Estados Unidos y sus aliados de la OTAN”.

Ryabkov señaló que, en llamadas telefónicas con miembros de alto nivel del gobierno del presidente Joe Biden, funcionarios rusos le habían advertido a Washington que no efectuara este tipo de acciones, y agregaron que el “involucramiento abierto y profundo de Estados Unidos” en la guerra en Ucrania “pone a Estados Unidos al borde de convertirse en una parte del conflicto”.

A pesar de los incidentes más recientes, un funcionario occidental dijo que la guerra se encuentra “casi en un estancamiento operativo”, en el que ninguna de las dos partes puede lanzar ofensivas a gran escala.