Un desafiante e incendiario Donald Trump, ante la posibilidad de su imputación judicial inminente, celebró este sábado su primer acto de campaña para las elecciones presidenciales de 2024 en la ciudad texana de Wako, famosa por un incidente mortífero de resistencia armada contra las fuerzas del orden hace casi 30 años.

Con una puesta de escena fuera de lo normal, Trump abrió su mitin con la canción Justicia para todos, que incluye un coro de hombre presos por su participación en el asalto al Capitolio del 6 de enero de 2021 entonando el himno nacional, y con una grabación del expresidente, que está siendo investigado por el Departamento de Justicia por ese ataque a la democracia estadounidense, recitando el juramento de lealtad a Estados Unidos. En las pantallas se mostraron además imágenes del ataque contra el Congreso, en el que murieron policías defendiendo esta institución democrática.

Trump, en un discurso resentido, defendió a los insurrectos y atacó a los fiscales que le investigan por éste y otros motivos, enmarcando las causas judiciales como ataques políticos a él y a sus seguidores.

“Quedaréis limpios de toda sospecha y orgullosos”, les prometió, “los matones y criminales que están corrompiendo nuestro sistema de justicia serán derrotados, desacreditados, y caerán en la más absoluta desgracia”.