Un inmigrante de origen mexicano murió en una prisión de Inmigración y Control de Aduanas (ICE) en Georgia; el onceavo que fallece en ese centro de detención.

Se trata de Salvador Vargas, quien fue declarado muerto a las 4:32 p.m. del 4 de abril, pero el hecho fue apenas informado por ICE.

El inmigrante se encontraba en el Hospital Regional Piedmont Columbus en Columbus, Georgia.

“Los funcionarios médicos del hospital informaron que la causa preliminar de la muerte fueron complicaciones de un derrame cerebral“, indicaron las autoridades.

El inmigrante, según el reporte de la agencia migratoria, estaba terminando una condena por posesión de drogas en la Institución Correccional de Dalby en Post, Texas, pero luego fue enviado a la prisión migratoria de Georgia.

Las autoridades migratorias no informaron los detalles de los hechos, si el inmigrante reportó sentirse mal y cómo fue el protocolo para intentar salvarle la vida.

“ICE ha notificado al Consulado de México sobre la muerte de Vargas; funcionarios consulares mexicanos han notificado a sus familiares”, se confirmó.

Azadeh Shahshahani, abogado de derechos humanos y director Legal y de Defensa de Proyecto Sur (Project South), criticó las acciones de autoridades.

Al menos 11 inmigantes han muerto en Stewart. Dos por suicidio, pero la Administración Biden ha rechazado cerrar esta mortal prisión de ICE”, tuiteó. “¡Cierren Stewart ahora!”.

Aunque ICE afirma tener un compromiso con la salud de los inmigrantes bajo arresto, un reporte de The Intercept documenta varios casos de negligencia en la atención a las personas con desafíos de salud.

Entre ellos está el caso de Roberto Blanco-González, quien en abril del 2020, reportó sentirse mal físicamente, quizás habría contraído COVID-19, pero las autoridades no lo atendieron hasta que comenzó una protesta, sentándose en una mesa sin intención de moverse.

“Dijo que un guardia se le acercó y le dijo que debía regresar a su celda ‘o ir a morir con los enfermos en el hoyo’”, señala el reporte de The Intercept.

ICE afirma que investiga el caso del inmigrante mexicano fallecido este 4 de abril.

“Se está llevando a cabo una revisión integral de este incidente en toda la agencia, como lo hace en todos los casos”, afirmó. “Las muertes bajo la custodia de ICE, estadísticamente, son extremadamente raras y ocurren en una fracción del promedio nacional para la población detenida de EE.UU.”