Un hombre fue sentenciado a más de dos décadas de prisión por la agresión sexual a una niña de 10 años a la que amarró y atacó en la parte trasera de una miniván en el estacionamiento de una tienda de Big Lots.
El agresor fue identificado como José Carabantes Pineda, un hombre de 37 años residente en Riverhead, en el estado de Nueva York. El hombre fue sorprendido agrediendo a la niña, que se defendía, por una persona que vio lo que ocurría y decidió actuar.
Los hechos ocurrieron en marzo de 2021. “Carabantes Pineda llevó a la víctima de 10 años al estacionamiento de la tienda Big Lots en Riverhead, la ató con cinta adhesiva y la agredió sexualmente en la parte trasera de una minivan”, detalla un comunicado de la oficina del fiscal de distrito del condado de Suffolk. “La niña gritó y golpeó las ventanas del vehículo con la esperanza de que alguien la ayudara mientras intentaba quitarse de encima al acusado”, agrega el informe.
Una persona que pasaba cerca escuchó a la niña gritar y golpeó en las ventanas, que estaban polarizadas. El testigo llamó al 911 e intentó seguir la minivan de Pineda, quien huyó del estacionamiento. Mientras escapaba, cambió su vehículo por otro diferente e intentó convencer a la niña para que contara que sus gritos se debían a que habían chocado la miniván en el estacionamiento y ella se había asustado.
Pero minutos después de llegar a su casa, el acusado fue arrestado por policía. En el registro a los dos vehículos que usó se encontraron restos de cinta adhesiva con la que había atado a la niña. Posteriormente, un examen médico confirmó que había ADN del hombre en el cuerpo de la menor.
Según la fiscalía, Pineda habría estado abusando sexualmente de la niña durante meses. No está clara cuál es la relación entre el agresor y la víctima. El hombre se declaró culpable de un delito sexual grave en febrero.
“La valentía de esta joven víctima para luchar contra su abusador, la rápida reacción de un buen samaritano y la rápida respuesta del Departamento de Policía de Riverhead son la razón por la que este depredador fue detenido”, declaró en un comunicado el fiscal de distrito del condado, Raymond A. Tierney. “El hecho de que haya personas que se aprovechan de niños inocentes como este es simplemente incomprensible. Pero no se equivoquen, una vez que los atrapemos, como a este acusado, haremos todo lo que esté a nuestro alcance para garantizar que cumplan una larga sentencia de prisión”, agregó.
Además de los 23 años de prisión, el juez del caso ordenó a Carabantes Pineda otros 20 años de supervisión tras ser liberado.