Varios grupos y coaliciones de organizaciones que defienden los derechos de los inmigrantes en Estados Unidos lanzaron un llamado de atención sobre las consecuencias que puede tener que el gobernador Ron DeSantis haya anunciado que la lucha contra la inmigración ilegal es la piedra angular de su campaña presidencial para las elecciones de 2024.
DeSantis inscribió oficialmente el miércoles su candidatura a las primarias republicanas y más tarde en una conversación con el empresario Elon Musk por Twitter esbozó su programa electoral, en el que los inmigrantes indocumentados tienen un protagonismo no buscado.
“Nuestra frontera es un desastre”, dice el gobernador DeSantis en su primer video oficial de campaña, un mensaje que reiteró en el accidentado lanzamiento de su candidatura el miércoles en Twitter, donde en conversación con el empresario Elon Musk señaló que la frontera sur de EEUU “colapsa” y las drogas entran “a raudales al país.
DeSantis es el promotor de una de las leyes estatales más duras contra los inmigrantes indocumentados, que entrará en vigor en Florida el 1 de julio.
Se espera de que si llega a la Casa Blanca tratará de extender esa norma, la ley SB 1718, a todo el país, aunque antes deberá pasar la prueba de fuego en Florida, un estado con una gran dependencia de los inmigrantes indocumentados en sectores como agricultura, hostelería y construcción.
“Sin haber entrado en vigencia, la ley SB 1718, impulsada por el gobernador DeSantis, ya ha hecho un impacto humano y económico en los habitantes de Florida”, dijo Juan Flores, presidente de la Fundación 15 de septiembre, que ha organizado para el próximo 1 de junio en Tampa, costa oeste del estado, una protesta contra “esta ley racista e inhumana”.
Denuncian política antiinmigrante de DeSantis
Tras conocerse de forma oficial las intenciones de DeSantis de llegar a la Casa Blanca, la Coalición de Inmigrantes de Florida (FLIC) destacó que la “cruzada antiinmigrante de DeSantis” en Florida, el hogar de 4.5 millones de extranjeros y el tercer estado mas diverso del país, “hace evidente su incapacidad para liderar”.
“En lugar de enfocarse en abordar los problemas que dañan a los floridanos, recurrió a atacar y vilipendiar a los inmigrantes y a usar a nuestras comunidades como chivos expiatorios”, agregó la organización, que recordó que la norma SB 1718 contempla hasta 15 años de prisión por vivir con un familiar indocumentado o transportarlo.
El gobernador de Florida no ha perdido oportunidad de criticar las políticas migratorias de la Administración de Biden y ha prometido volver a enviar a la frontera sur fuerzas de seguridad estatales, como lo hizo en 2021.
DeSantis se procuró atención mediática cuando el año pasado trasladó en vuelos chárter a medio centenar de venezolanos que acababan de cruzar la frontera sur desde Texas hasta Martha’s Vineyard, en Massachusetts.
A juicio de Beatriz López, directora política del Centro de Inmigración, Florida ya está sintiendo las consecuencias económicas de las políticas extremas del gobernador, con escasez de mano de obra y sitios de trabajo vacíos, debido a los crecientes temores de los inmigrantes por la ley SB 1718.
“DeSantis ha hecho de las políticas antiinmigrantes una piedra angular de su campaña presidencial incluso cuando el estado de Florida, sus trabajadores, empresas y economía, sufren”, aseveró López.