La policía de Houston indicó que Rudy Farias no estuvo ocho años desaparecido, como afirmó su familia la semana pasada tras informar que había sido localizado por un buen samaritano a las puertas de una iglesia de Houston (Texas). En una rueda de prensa, las autoridades de la ciudad texana aseguraron que el joven regresó a su casa al día siguiente de desaparecer, el 8 de marzo de 2017, cuando tenía 17 años.
Durante esos ocho años, el joven tuvo contactos con la policía, pero dio un nombre falso, por lo que nunca se pudo confirmar que en realidad no estaba desaparecido como se había reportado. Sin embargo, los agentes sabían que no lo estaba, dijo la policía este miércoles, a partir de declaraciones de familiares y conocidos.
“Rudy fue identificado recientemente como una persona que ha tenido interacciones previas con policías en la calle pero, durante esos contactos, proporcionó nombres ficticios y fechas incorrectas lo que generó confusión. Tanto Rudy como su madre dieron nombres falsos en sus encuentros con la policía”, dijo Troy Finner, jefe del Departamento de Policía de Houston.
La madre del joven “siguió engañando a la policía diciendo que seguía desaparecido”, dijo Finner, agregando que “por ahora no se presentarán cargos criminales”. Farias no sufrió abusos sexuales, dijo la policía, y tampoco hay información de que estuviera secuestrado, ni se hallaron indicios de problemas de salud mental.
Las autoridades dijeron que siguen investigando este caso y precisaron que Farias fue puesto en contacto con los servicios de atención a las víctimas de la policía de Houston para ayudarlo en su recuperación.























