El gobernador de Hawai, Josh Green, afirmó que lo que se reconstruya de las cenizas de los devastadores incendios que arrasaron parte de la isla de Maui estará determinado por el pueblo.
“Lahaina se levantará de nuevo”, indicó Green durante un discurso emitido en vivo desde Honolulu. La localidad costera se reconstruirá como un monumento viviente a los muertos — que el viernes ascendieron a 114 — al tiempo que se preservará y protegerá y la cultura nativa hawaiana, añadió el mandatario.
Su esposa, Jaime Kanani Green, de pie junto a él, lloró al describir Lahaina como una vibrante comunidad y rica en historia y cultura.
Los nativos hawaianos y otros habitantes de Lahaina señalaron que les preocupa que el gobernador estuviese actuando muy rápido para reconstruir lo perdido mientras el dolor estaba aún vivo.
“El incendio ocurrió hace apenas 10 días y mucha gente sigue impactada y en duelo”, dijo Tiare Lawrence, que creció en Lahaina, en una emotiva conferencia de prensa organizada por activistas comunitarios.
Le pidieron a Green que de tiempo a los residentes para llorar sus pérdidas, conceda a los líderes comunitarios poder en la toma de decisiones para la recuperación y cumpla las leyes de registros públicos ante la desconfianza en la respuesta del gobierno a la tragedia.
En su discurso, Green trató de disipar todas las preocupaciones e indicó que la reconstrucción tomará años y miles de millones de dólares.























