El gobierno de Texas confirmó que ha comenzado a trasladar en avión y manera gratuita a indocumentados que deseen llegar a Chicago.
Ante lo que califica como un nulo interés del gobierno federal por reforzar la seguridad en los pasos fronterizos limítrofes con México, desde el año pasado, el mandatario estatal Greg Abbott les ha brindado a más de 80 mil inmigrantes indocumentados transporte terrestre gratuito hacia distintas ciudades consideradas santuario, esto en virtud de que ahí se les ofrece apoyo para no ser deportados.
El objetivo del gobernador de 66 años es evitar a toda costa que las personas que ingresan de manera ilegal a territorio estadounidense pretendan por comodidad quedarse en Texas y no continuar su camino hacia el norte del país, pues señala que ello afirma generaría problemas de inseguridad, escases de trabajo y problemas a la economía local.
Ante la imposibilidad de sellar la frontera tejana por completo, Abbott se inclinó por facilitarles transportación a los inmigrantes hacia Los Angeles, New York y Chicago.
Sin embargo, en este último destino el alcalde Brandon Johnson comenzó a poner en marcha algunas acciones orientadas a evitar la llegada de más autobuses repletos de inmigrantes indocumentados.
Por ello, para evitar ser multados por las autoridades de Chicago, los operadores de los vehículos optaron por dejar a las personas varadas a kilómetros de distancia de la “Ciudad de los vientos”.
En respuesta, el gobierno texano comenzó a ofrecerles a quienes han cruzado la frontera ilegalmente procedentes de México la opción de transportarlos vía aérea.
De hecho, Andrew Mahaleris, vocero del gobernador de Texas, dio a conocer que el martes despegó del Paso, el primer vuelo con 120 personas a bordo con destino hacia Chicago.
“Hasta que el presidente Biden dé un paso al frente y haga su trabajo para asegurar la frontera, Texas seguirá tomando medidas históricas para ayudar a nuestros socios locales a responder a esta crisis provocada por Biden”, señaló a través de un comunicado.
Al respecto, Angelo Fernández, portavoz de la Casa Blanca, también emitió una misiva donde reprocha la acción ejercida por el mandatario texano.
“Una vez más, el gobernador Abbott está mostrando la poca consideración o respeto que tiene por los seres humanos.
Este último truco político se suma a su lista de políticas extremas que buscan demonizar y deshumanizar a las personas”, señala el documento.
