Agentes de la Patrulla Fronteriza en la frontera sur cerca de El Paso, Texas, encontraron alrededor de 40 migrantes hacinados dentro de varios vehículos, cuando interrumpieron al menos dos operaciones de tráfico de personas a principios de esta semana.
El agente jefe de patrulla del sector de El Paso, Anthony “Scott” Good, publicó imágenes el lunes X que muestran a 24 migrantes hacinados en al menos dos vehículos.
En una de las imágenes se puede ver a unos 11 hombres acostados, metidos en la parte trasera de una camioneta de color blanco y cubiertos con una lona. En otra imagen se puede ver a varios hombres y mujeres apretujados en la parte trasera de otro vehículo.
Good escribió que la Unidad Anticontrabando de la Patrulla Fronteriza de Santa Teresa junto con el Destacamento de Operaciones Especiales y el Departamento de Seguridad Pública de Texas se unieron para frustrar la operación de contrabando.
“El trabajo en equipo [con] nuestros socios encargados de hacer cumplir la ley es clave”, indicó Good.
“Los contrabandistas transportaron a estos individuos sin tener en cuenta sus vidas”, escribió Good.
En una de las imágenes se ve a los migrantes, en su mayoría hombres, sentados en el cemento con la cara tapada. Otra foto muestra un mini-SUV vacío chocando contra otro vehículo.
No está claro si los migrantes fueron detenidos o si alguien fue arrestado por la operación de contrabando.
Los incidentes se produjeron después de que la frontera sur de Estados Unidos registrara su tasa más alta de encuentros de migrantes el mes pasado, superando las estadísticas anteriores.
Fuentes de Aduanas y Protección Fronteriza dijeron a Fox News Digital que los encuentros con migrantes alcanzaron la asombrosa cifra de 300,000 incidentes en el último mes de 2023, un nivel que se pensaba inimaginable hace apenas unos años.
Es el total más alto jamás registrado en un solo mes. También es la primera vez que los encuentros de migrantes superan los 300,000.
Estados Unidos ha deportado en los últimos ocho meses a cerca de medio millón de migrantes, que no lograron demostrar una “base legal” para permanecer en el país, de acuerdo con el Departamento de Seguridad Nacional estadounidense (DHS).
Según la información oficial, desde el 12 de mayo, el DHS ha removido o retornado a más de 482,000 personas, la gran mayoría de las cuales cruzaron la frontera suroeste, incluyendo a más de 81,000 familiares individuales.
En siete meses, esta cifra casi excede el número de personas deportadas en todo el año fiscal 2019 y excede el número en cada año fiscal completo de 2015-2018. Las deportaciones diarias son casi el doble en comparación con el promedio antes de la pandemia (2014-2019).
En un comunicado, el DHS explicó que entre el lunes pasado y hoy se han realizado varios vuelos desde EE.UU. hacía países de Centroamérica y Venezuela con migrantes deportados.
