Con la temporada electoral de Estados Unidos ya en marcha, algunos funcionarios electorales estatales están expresando su frustración por el hecho de que el Congreso aún no haya asignado los fondos federales de los que dependen para ayudar a cubrir los costos de proteger sus sistemas contra posibles ataques, actualizar equipos y capacitar al personal.

Los funcionarios electorales enfrentan una larga lista de retos este año, entre los que se incluyen posibles ciberataques por parte de gobiernos extranjeros, ataques de “ransomware” por parte de bandas criminales, y la persistencia de la desinformación electoral que ha llevado al acoso de funcionarios electorales y erosionado la confianza pública.

La secretaria de Gobierno de Michigan, Jocelyn Benson, calificó de “desmoralizador y decepcionante” que el gobierno federal no se haya comprometido a invertir en las elecciones presidenciales de este año.

”Estamos gestionando unas elecciones federales que son la base de quién tiene el poder a nivel federal y tratando de gestionar un montón de riesgos y retos que no han hecho más que aumentar en los últimos años”, dijo Benson, una demócrata. “Nos hace sentir que estamos solos”.