El gobierno de Estados Unidos tratará de poner fin parcialmente a la supervisión judicial de 27 años sobre cómo el gobierno federal cuida a los niños migrantes que viajan sin compañía de un adulto, poco después de elaborar su propio conjunto de medidas de protección contra el maltrato, de acuerdo con un abogado involucrado en el caso.
El Departamento de Justicia ha informado a los abogados que se oponen a la medida que pedirá a un juez federal el viernes que ponga fin al llamado Acuerdo Flores en el Departamento de Salud y Servicios Humanos (HHS por sus siglas en inglés), que asume la custodia de los niños que viajaron sin compañía de un adulto en las 72 horas posteriores a su detención por la Patrulla Fronteriza, según Leecia Welch, directora adjunta de litigios en Children’s Rights, que representa a los niños en el caso.
El histórico acuerdo, nombrado por una niña migrante de El Salvador, Jenny Flores, seguirá en vigor en la Patrulla Fronteriza y su agencia matriz, el Departamento de Seguridad Nacional (DHS por sus siglas en inglés), creando lo que Welch llamó un desmantelamiento “por partes”. Los abogados de los niños que viajaron solos se opondrán a la medida, la cual estaría sujeta a la aprobación de la jueza federal de distrito, Dolly Gee, en Los Ángeles.
























