Un tribunal salvadoreño instaló el martes un nuevo juicio penal contra el expresidente Mauricio Funes por lavado de activos, por presuntamente licitar un puente a favor de una empresa guatemalteca a cambio de recibir un avión. El exmandatario, asilado en Nicaragua, tiene siete procesos penales en su contra y dos de ellos con condena.
El caso ventilado en un tribunal de San Salvador, inició en diciembre de 2020, cuando el Ministerio Publico acusó al exmandatario y giró la séptima orden de captura en su contra. Un año antes, el gobierno del nicaragüense Daniel Ortega le otorgó la nacionalidad para evitar que fuera extraditado.
Funes, que gobernó El Salvador de 2009 a 2014, vive en Nicaragua bajo la protección del gobierno de Ortega y no ha estado presente en ninguno de los juicios en su contra. En uno, condenado por negociar con pandillas durante su mandato, fue condenado a 14 años de prisión; en otro por enriquecimiento ilícito, fue sentenciado a devolver más de 400.000 dólares.
Según informó la Fiscalía en un comunicado, el exmandatario entregó el proyecto de diseño y construcción de un puente en 2013 a una empresa guatemalteca por 8,4 millones de dólares. A cambio, Funes presuntamente recibió un avión modelo King Air para uso de él y de un empresario, que usaron para viajes con sus familias a Estados Unidos, Costa Rica, Nicaragua, Panamá, Honduras y Guatemala.