El ministro de Defensa israelí, Yoav Gallant, anunció este martes la firma de un nuevo acuerdo con Estados Unidos, pese a la polémica en torno al uso de armamento norteamericano en la guerra en Gaza, que incluye la entrega de 25 cazas F-35 a partir de 2028.

“Esto envía un poderoso mensaje a nuestros enemigos en toda la región. Me gustaría expresar mi aprecio y gratitud a nuestros socios en el Departamento de Defensa de Estados Unidos y al Gobierno estadounidense”, dijo hoy Gallant en un comunicado tras la firma del nuevo acuerdo, valorado en unos 3.000 millones de dólares.

Los aviones de guerra serán entregados a un ritmo de unos tres a cinco por año, lo que ampliará la flota israelí de estos modelos fabricados por la multinacional estadounidense Lockheed Martin a un total de 75.

La adquisición de estos cazas forma parte de una iniciativa que el Ministerio de Defensa israelí y el Ejército promovieron durante los dos últimos años “para fortalecer las capacidades y su poder de respuesta ante (las) amenazas existentes y futuras”.

El anuncio del acuerdo llega cuando parte de la comunidad internacional le urge a Estados Unidos que deje de armar a Israel, quien mantiene una guerra en la Franja de Gaza donde ya han muerto más de 36.500 personas, según autoridades sanitarias del enclave.

El pasado 10 de mayo, Estados Unidos afirmó que Israel había usado armas estadounidenses en Gaza de manera “inconsistente” con el derecho internacional humanitario, pero que no había hallado información suficiente que justifique frenar su envío.

Dos días antes, el Gobierno del presidente estadounidense, Joe Biden, anunció que suspendía de forma temporal el envío de un cargamento de armas a Israel mientras estudiaba cómo responder a la incursión militar israelí en Rafah, que continúa desde el pasado 6 de mayo y ha provocado la huida de más de un millón de personas.