Una de las mayores críticas a la proclamación del presidente Joe Biden sobre la frontera, la petición de asilo y las deportaciones es que ciertos inmigrantes tendrán solamente cuatro horas para encontrar una defensa legal.
Las personas que crucen la frontera sin papeles podrán ser procesadas para su deportación acelerada, pero también podrán pedir asilo y exponer su caso, aunque tendrán solamente cuatro horas para conseguir a un abogado.
La agencia de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP) tendrá bajo custodia a estas personas, aunque también podrían ser enviadas con Inmigracón y Control de Aduanas (ICE).
Las entrevistas de “miedo creíble” para exponer un caso de asilo serán realizadas con funcionarios de Servicios de Ciudadanía e Inmigración (USCIS), ante quienes los inmigrantes deberían tener un abogado.
El Departamento de Seguridad Nacional (DHS) indicó que las nuevas políticas deberían reducir el tiempo que lleva procesar a los inmigrantes entre 30 y 45 minutos, lo cual permitirá mantener espacio para los inmigrantes bajo custodia.
No hay una cifra exacta de cuántos inmigrantes han sido ya procesados y deportados bajo la nueva regla, pero ya hay casos, según DHS.
Organizaciones civiles y abogados de inmigración han alertado sobre la nueva regla de cuatro horas para que un inmigrante consiga un abogado.
“Es fundamental que todos aquellos que estén interesados en solicitar asilo en la frontera tengan en cuenta estas directrices, con el objetivo de que lleguen preparados”, dijo el abogado Héctor Quiroga, quien opera en el estado de Washington. “La idea es que una vez estén en el lugar, ya cuenten, al menos, con el dato de un abogado de inmigración o al menos un directorio de representantes legales que los puedan auxiliar en esa difícil situación, para que la entrevista de miedo creíble sea satisfactoria”.
La Administración Biden ha señalado que la nueva política aumenta los estándares de evaluación de los casos, lo que complica a las personas demostrar su situación y amenazas que pudiera enfrentar.
La regla será impuesta cuando el flujo de inmigrantes constante supere los 2,500 diarios, y será relajada cuando baje a menos de 1,500. Eso no significará una apertura de la frontera.
Los expertos insisten en la importancia de contar con algún abogado, porque los casos de asilo no son fáciles.
“No podemos olvidar que este tipo de solicitudes requieren tiempo y preparación, por lo que adelantarse será crucial para obtener los resultados esperados”, enfatizó el abogado Quiroga en un boletín semanal.
