Las autoridades francesas presentaron el miércoles cargos preliminares contra Pavel Durov, director general de Telegram, por permitir presuntas actividades delictivas en su aplicación de mensajería, y le prohibieron salir de Francia a la espera de que prosiga la investigación.

Durov fue detenido el sábado en el aeropuerto de Le Bourget, en los suburbios de París, en el marco de una amplia investigación judicial abierta el mes pasado, y puesto en libertad el miércoles tras cuatro días de interrogatorios. Los jueces de instrucción presentaron los cargos preliminares el miércoles por la noche y le impusieron una fianza de 5 millones de euros y la obligación de presentarse en la comisaría dos veces por semana, de acuerdo con un comunicado de la fiscalía parisina.

Las acusaciones contra Durov, nacido en Rusia y nacionalizado francés, incluyen que su plataforma se utiliza para difundir pornografía infantil y material relacionado con el narcotráfico, y que Telegram se negó a compartir información o documentos con los investigadores cuando se le requirió.

La detención de Durov en Francia ha causado indignación en Rusia, y algunos funcionarios han dicho que tiene motivaciones políticas y que es prueba del doble rasero de Occidente en materia de libertad de expresión. La protesta ha levantado ámpulas entre los críticos del Kremlin porque, en 2018, las propias autoridades rusas intentaron bloquear la aplicación Telegram, pero fracasaron y retiraron la prohibición en 2020.