El líder de Hezbollah, Hasán Nasrala, dijo el jueves que la detonación de dispositivos electrónicos fue un “golpe severo” que cruzó “una línea roja”, pero insistió en que el grupo saldrá fortalecido y continuará sus ataques diarios contra Israel.
Hezbollah está investigando las detonaciones, por las cuales se ha culpado a Israel, dijo Nasrala.
“Sí, fuimos sometidos a un golpe enorme y severo”, dijo Nasrala. “El enemigo cruzó todos los límites, todas las líneas rojas”, añadió.
Como es usual, Nasrala habló por video desde una localidad secreta. Usualmente Hezbollah convoca a sus seguidores a venir a concentraciones para ver los discursos de Nasrala en enormes pantallas, pero esta vez no hubo concentración alguna.
Nasrala dijo que Hezbollah continuará sus ataques contra Israel mientras siga la guerra en Gaza.
“El frente libanés no cesará antes de que cese la agresión en Gaza”, expresó.
“La única vía es cesar la agresión contra los pueblos de Gaza y la Margen Occidental”, declaró, “ni ataques, ni asesinatos ni una guerra abierta lograrán eso”.
Añadió que “el enemigo enfrentará un castigo severo, desde donde lo espera y desde donde no lo espera”.