Los comentarios emitidos por los republicanos encabezados por Donald Trump con respecto a que los inmigrantes haitianos en Ohio estaban robando a las mascotas para comérselas, presuntamente, les está ocasionando problemas a los caribeños que simplemente buscan solidaridad ante la desgracia de ver a su nación sumida entre miseria y violencia.
De acuerdo con información divulgada por la ciudad de Springfield, en los últimos cuatro años han arribado a la pequeña ciudad de Ohio entre 12,000 y 15,000 inmigrantes haitianos que abandonaron su nación debido a la violencia y a la pobreza.
Estas personas temporalmente reciben asistencia legal bajo el Programa de Libertad Condicional para Inmigrantes, esto mientras se le brinda una respuesta a una solicitud presentada para residir permanentemente en el territorio estadounidense.
Al respecto, durante su participación en el debate que sostuvo frente a Kamala Harris, Trump arremetió en contra de estos inmigrantes.
Sin fundamento ni veracidad, señaló que, en Springfield, los ciudadanos se estaban quejando de un grupo de haitianos dedicados a robar mascotas para alimentarse de ellas.
“Muchas ciudades no quieren hablar de ello porque les da mucha vergüenza. En Springfield se están comiendo a los perros”, enfatizó.
Posteriormente, aunque Mike DeWine, gobernador republicano de Ohio, desestimó las declaraciones de Trump, una investigación realizada por la cadena de televisión ABC News, detectó que comienza a imperar temor entre los haitianos de que puedan ser agredidos y por lo tanto se están encerrando en los sitios donde se alojan.
James Fleurijean, miembro del Centro de Ayuda y Apoyo Comunitario de Haití, se refirió a lo enrarecido que se encuentra el ambiente.
“Sé que algunos padres prefieren que sus hijos se queden en casa durante este período de tiempo, para ver cómo van a ir las cosas y esperar un par de semanas para ver si las cosas se calman o si empeoran. Es por eso que algunos padres ni siquiera envían a sus hijos a la escuela durante esta semana”, expresó.
Un haitiano citado de manera anónima por la televisora, reconoció que sus compatriotas se han sentido aterrorizados y a varios de sus compañeros que antes veía en las calles ya no los ubica.