El presidente de FWD.us, Todd Schulte, publicó la siguiente declaración después de que el expresidente Donald Trump anunciara que tiene la intención de invocar la Ley de Enemigos Extranjeros de 1798 para llevar a cabo separaciones familiares y deportaciones masivas de inmigrantes en todo el país si es reelecto en las elecciones de 2024 durante un evento de campaña realizado el viernes en Aurora, en Colorado:

“Hoy, la promesa del expresidente Trump de invocar la Ley de Enemigos Extranjeros marca una peligrosa escalada. Esta ley, que alguna vez se utilizó para encarcelar a 120,000 estadounidenses de origen japonés en campos de internamiento durante la Segunda Guerra Mundial, ahora se está utilizando como arma para difundir mentiras sobre los inmigrantes en 2024. Este es un intento desesperado de reempaquetar una agenda de separación familiar masiva que sigue siendo tóxica para los votantes estadounidenses”, dijo Schulte.

Schulte advirtió en su declaración: “El expresidente está proponiendo utilizar la Ley de Enemigos Extranjeros de 1798 para poder despojar a millones y millones, incluidos ciudadanos estadounidenses, residentes permanentes e inmigrantes con estatus legal e individuos indocumentados, del debido proceso, sometiéndolos a arresto y deportación casi inmediata sin acceso a ninguna audiencia. Esto crearía caos, violaría “Los derechos de las personas y devastan las comunidades”.

Y es que la Ley de Enemigos Extranjeros que Trump asegura que invocaría para hacer deportaciones masivas, permitiría deportar a cualquier inmigrante, aunque tenga un estatus legal, advierten expertos del Brennan Center for Justice en su análisis  “Los inmigrantes latinos no son enemigos extranjeros”.

¿Qué es la Ley de Enemigos Extranjeros?

La Ley de Enemigos Extranjeros de 1798 es una autoridad en tiempos de guerra que permite al presidente detener o deportar a los nativos y ciudadanos de una nación enemiga, según la explicación de la misma publicada por el Brennan Center.

La ley permite al presidente atacar a estos inmigrantes sin una audiencia y basándose únicamente en su país de nacimiento o ciudadanía.

Aunque la ley fue promulgada para prevenir el espionaje y el sabotaje extranjeros en tiempos de guerra, puede ser utilizada, y se ha utilizado, contra inmigrantes que no han hecho nada malo, no han mostrado signos de deslealtad y se encuentran legalmente en los Estados Unidos.

Es una autoridad demasiado amplia que puede violar los derechos constitucionales en tiempos de guerra y está sujeta a abuso en tiempos de paz.

La Ley de Enemigos Extranjeros se ha invocado tres veces, cada vez durante un conflicto bélico importante: la Guerra de 1812, la Primera Guerra Mundial y la Segunda Guerra Mundial.

En la Primera y la Segunda Guerra Mundial, la ley fue una autoridad clave en las detenciones, expulsiones y restricciones dirigidas a inmigrantes alemanes, austrohúngaros, japoneses e italianos basándose únicamente en su ascendencia.

La ley es más conocida por su papel en el internamiento de japoneses durante la Segunda Guerra Mundial, una parte vergonzosa de la historia de Estados Unidos por la que el Congreso, los presidentes y los tribunales se han disculpado.