Restablecer una oficina de inmigración en la infame cárcel de Rikers Island en Nueva York es sólo el primer paso en un acuerdo más complejo que el gobierno del presidente Donald Trump ha alcanzado con el alcalde demócrata Eric Adams, anunció el viernes el nuevo zar de la frontera durante su primera aparición pública conjunta.
Tom Homan y Adams aparecieron uno al lado del otro en el programa televisivo “Fox & Friends” un día después de que ambos anunciaron que Adams había acordado firmar una orden ejecutiva para restablecer una oficina del Servicio de Control de Inmigración y Aduanas (ICE, por sus siglas en inglés) en el complejo penitenciario. Uno de los propósitos de la oficina será compartir información sobre pandillas, dijeron.
El acuerdo ya está recibiendo fuertes críticas por parte de los líderes del Ayuntamiento de Nueva York, después de que fiscales renunciaron en protesta contra una directiva del Departamento de Justicia de Trump para desestimar los cargos de corrupción contra Adams. La principal fiscal describió el acuerdo como un “quid pro quo” en su carta de renuncia.
Adams ha negado ese análisis y esquivó las preguntas al respecto durante la entrevista de 20 minutos de duración en Fox.
El viernes por la mañana, Homan dijo que el acuerdo con Adams sobre la prisión en Rikers Island, que ha estado bajo órdenes judiciales para resolver problemas antiguos con la seguridad, el uso de la fuerza y más, era sólo una parte de una colaboración más grande.
“Estamos trabajando en algunas otras cosas de las que realmente no queremos hablar en áreas abiertas porque el Ayuntamiento nos pondrá obstáculos”, comentó Homan. “Pero el alcalde y yo nos hemos comprometido a varias otras cosas que harán que la ciudad sea más segura”.
Esos compromisos podrían poner a Adams en desacuerdo con el electorado progresista de Nueva York, mientras el alcalde busca ganar su voto en camino hacia la reelección.
