Providence – Frank Caprio, quien se desempeñó como juez del Tribunal Municipal de Providence durante casi 40 años, falleció. Tenía 88 años. El fallecimiento de Caprio fue confirmado el miércoles por su hijo.
Caprio creció en Federal Hill, Providence, y es el segundo de tres hijos. De joven, lustraba zapatos, repartía periódicos y trabajaba en un camión lechero, siguiendo el ejemplo de sus padres de “trabajar duro para mejorar la vida de quienes lo rodeaban”, según se lee en su sitio web. Se graduó de la Central High School y obtuvo una licenciatura en Providence College.
Tras graduarse, se quedó en la capital y comenzó a enseñar Gobierno Estadounidense en la Hope High School. Mientras enseñaba, asistió a clases nocturnas en la Facultad de Derecho de la Universidad de Suffolk en Boston, lo que lo llevó a dedicarse a la abogacía. Fue elegido juez en 1985 y se hizo famoso por su serie de televisión “Atrapados en Providence”, nominada a un Premio Emmy Diurno en 2021.
Caprio se volvió viral en redes sociales al desestimar las multas de los residentes que aparecían en el programa y compartían sus historias personales. También se desempeñó durante 10 años como presidente de la Junta de Gobernadores de Rhode Island para la Educación Superior, el órgano rector de la Universidad de Rhode Island, Rhode Island College y el Community College de Rhode Island.
En la Facultad de Derecho de la Universidad de Suffolk, Caprio fundó el Fondo de Becas Antonio “Tup” Caprio. Lleva el nombre de su padre y se otorga a estudiantes de Rhode Island comprometidos con mejorar el acceso a servicios legales en barrios marginados. También ha establecido becas en nombre de su padre en Providence College y Central High School.
Caprio anunció su retiro del Tribunal Municipal de Providence en enero de 2023, después de casi 40 años en el cargo. Tras su jubilación, Providence renombró su tribunal municipal en honor a Caprio en octubre de 2023. Poco después de cumplir 87 años, anunció que le habían diagnosticado cáncer de páncreas en diciembre de 2023. Completó su último tratamiento de radioterapia en mayo del año siguiente. Caprio deja a su esposa, Joyce, así como a cinco hijos, siete nietos y dos bisnietos.