El Departamento de Justicia de Estados Unidos demandó este jueves a la ciudad de Boston y su alcaldesa, Michelle Wu, por sus políticas de refugio para inmigrantes que el Gobierno de Donald Trump argumenta “interfieren” con sus restrictivas leyes.
Boston, capital y ciudad más poblada de Massachusetts, es una de las jurisdicciones en el punto de mira del Gobierno de Trump por sus políticas “santuario”, que limitan la colaboración de sus policías locales con los agentes del Servicio de Control de Inmigración y Aduanas (ICE).
La fiscal general de EE.UU., Pam Bondi, acusó a Wu y su administración local de “ejecutar explícitamente políticas diseñadas para socavar el cumplimiento de la ley y proteger a los extranjeros ilegales de la justicia”, en referencia a su rechazo a la colaboración con el ICE.
En un comunicado, el Departamento de Justicia argumentó que ese rechazo a la cooperación “resulta en la liberación de criminales peligrosos en custodia policial que, de otra manera, estarían sujetos a deportación”.
El pasado 5 de agosto, el Gobierno de Trump publicó una lista de jurisdicciones “santuario” como medida de presión para que abandonen su apoyo a los inmigrantes, con la meta de penalizarlas por lo que la Justicia considera “obstrucción” a sus leyes migratorias.
El Departamento de Justicia ha demandado previamente a otras grandes ciudades “santuario” como Nueva York y Los Ángeles, así como a los estados de Colorado, California e Illinois.