La Corte de Apelaciones del Noveno Circuito ha autorizado al Gobierno del republicano Donald Trump desplegar a la Guardia Nacional en las calles de Portland, Oregon, en contra de la voluntad del estado, suspendiendo así la orden de un tribunal inferior que había prohibido el despliegue.

“Tras considerar el expediente en esta etapa preliminar, concluimos que es probable que el presidente ejerciera legítimamente su autoridad legal”, escribió el panel de jueces del Tribunal de Apelaciones del Noveno Circuito de Estados Unidos en un fallo por 2 votos a 1.

Los abogados del Departamento de Justicia argumentaron en un expediente judicial que la decisión de la jueza federal de distrito Karen Immergut, que suspendió temporalmente el despliegue, “interfiere indebidamente en la supervisión de las operaciones militares por parte del Comandante en Jefe, anula una directiva militar dirigida a los oficiales en el campo y pone en peligro al personal y la propiedad federales”.

Immergut, nominada por Trump, afirmó en su orden que parecía que el presidente actuaba de mala fe al exagerar las afirmaciones sobre la violencia en la ciudad, incluyendo que estaba “devastada por la guerra” con “instalaciones de ICE asediadas por ataques de Antifa” y “personas dementes” que “intentan incendiar edificios, incluidos edificios federales” todas las noches.

“La determinación del presidente simplemente no se ajustó a los hechos”, escribió la jueza. Añadió que, si bien hubo algunas protestas que se tornaron violentas en junio, las fuerzas del orden federales y estatales parecen tener la situación bajo control.

“El 26 de septiembre, víspera de la orden del presidente, las fuerzas del orden observaron aproximadamente entre 8 y 15 personas en un momento dado frente a ICE. La mayoría estaban sentadas en sillas de jardín y caminando. Había poca energía, mínima actividad”, señaló su orden.