La cantidad de inmigrantes que continúan llegando a Boston ha hecho que los recursos de Massachusetts resulten insuficientes para atenderlos y por ello, en Boston, se planea colocarlos en viviendas que antes eran destinadas a veteranos.
Desde el verano pasado, la gobernadora demócrata Maura Healey declaró el estado de emergencia ante la oleada de inmigrantes que arribaron al estado y también por instrucciones suyas, para brindarles hospedaje a quienes siguen llegando, se les destinará un espacio temporal.
Es así como, a partir del 1 de mayo, el Hogar de Veteranos de Chelsea se convertirá en un “sitio de red de seguridad” para inmigrantes.
De acuerdo con el sitio web del estado, dicho espacio “ofrece programas residenciales y de atención a largo plazo a los veteranos elegibles de Massachusetts”.
Sin embargo, la oficina de la gobernadora asegura que el inmueble está vacío e incluso programado para ser demolidoAl respecto, Scott Rice, director de Asistencia de Emergencia, emitió un comunicado a media semana donde reitera la compleja situación que enfrentan en el estado debido al fenómeno migratorio.
“Hemos dicho durante meses que nuestro sistema está al límite de su capacidad y que no tenemos el espacio, los proveedores ni los fondos para continuar expandiéndolo”, indicó.
Por su parte, Jon Santiago, secretario de servicios para veteranos de Massachusetts, asegura que el apoyo que se les brindará a los inmigrantes no afecta a las actividades programadas para sus miembros.
“Este proyecto opera de forma independiente y no afectará las rutinas o servicios diarios en el Hogar de Veteranos de Massachusetts en Chelsea”, mencionó.
El arribo de inmigrantes a Boston propició que el refugio de emergencia más nuevo del estado, ubicado en Roxbury, llegara a su máxima capacidad en tan solo una semana.