Las autoridades brasileñas trabajaban el sábado para esclarecer la causa exacta de la caída de un avión registrada en la víspera en el estado de Sao Paulo, incidente en que fallecieron las 62 personas que iban a bordo de la aeronave.

Las cuadrillas de rescate recuperaron docenas de cadáveres de entre los restos del avión y las familias comenzaron a reunirse para identificar a sus seres queridos.

El avión, un bimotor de turbohélices ATR 72-500 de la aerolínea brasileña Voepass, se dirigía al aeropuerto internacional de Guarulhos, en Sao Paulo, con 58 pasajeros y cuatro tripulantes a bordo cuando se estrelló en la ciudad de Vinhedo.

En un principio, la aerolínea señaló que su avión llevaba 62 personas a bordo, luego informó que eran 61 y el sábado temprano volvió a subir el número a 62 luego que encontró que un pasajero llamado Constantino Thé Maia no figuraba en la lista original.

VoePass explicó que tres pasajeros con identificaciones brasileñas también llevaban documentos venezolanos, y uno de ellos tenía documentos portugueses.

El gobierno del estado de Sao Paulo informó en un comunicado que, hasta la tarde del sábado, se habían retirado 31 cadáveres de entre los restos del avión y dos habían sido identificados por expertos forenses. Antes, Maycon Cristo, vocero del Departamento de Bomberos local, dijo a periodistas en Vinhedo que se utiliza un cabrestante para retirar del suelo partes del armazón del avión