El secretario de Estado de Estados Unidos, Antony Blinken, terminó el jueves en Polonia una gira europea por tres naciones centrada en Ucrania tras oír repetidos llamados de autoridades ucranianas para usar armamento proporcionado por Occidente para realizar ataques de largo alcance en territorio ruso.

Blinken viajó a Varsovia tras pasar un día en Kiev con el secretario de Exteriores británico, David Lammy, en el que ambos se comprometieron a presentar las peticiones de Ucrania ante sus líderes.

El presidente estadounidense Joe Biden y el primer ministro británico Keir Starmer se reunirán el viernes en Estados Unidos, con señales de que Washington y Londres se muestran cada vez más receptivos a permitir que Ucrania use sus armas para atacar blancos en zonas más profundas de Rusia que lo que se había permitido anteriormente.

“Como ha cambiado lo que hace Rusia, como ha cambiado el campo de batalla, nosotros nos hemos adaptado”, dijo Blinken en una conferencia de prensa en Varsovia.

Biden ha permitido que Ucrania dispare misiles suministrados por Estados Unidos a través de la frontera hacia territorio ruso en acciones de autodefensa, pero ha limitado la distancia a la que pueden ser disparados.