En un revés al movimiento #MeToo, la Corte de Apelaciones de Nueva York anuló este jueves la condena impuesta en 2020 al exproductor de cine Harvey Weinstein por delitos sexuales y ordenó un nuevo juicio, una decisión que ha conmocionado a las organizaciones feministas.

En una ajustada decisión de 4 votos a 3, los magistrados citan errores en el juicio, como la inclusión de testigos que se habían declarado víctimas del productor pero que no eran parte de la acusación contra él, por lo que el tribunal concluye que no tuvo un «juicio justo».

«El acusado tiene derecho a rendir cuentas solo por el delito que se le imputa y, por tanto, no pueden admitirse en su contra alegaciones de malos actos anteriores con el único propósito de establecer su propensión a la criminalidad», justificó la jueza Jenny Rivera, del grupo que aprobó la decisión judicial.

Por lo que el tribunal «revoca» la condena y ordena un «nuevo juicio» que subsane los «enormes errores» producidos en el primero, concluye.

Weinstein, de 72 años, fue declarado culpable de varios delitos sexuales por un jurado en Nueva York y condenado en 2020 a 23 años que cumple en una prisión en la localidad de Rome, en el estado de Nueva York.

No está claro cuál es futuro inmediato del productor que fue condando por una corte de California en 2022 a 16 años de cárcel por violar a una mujer en un hotel de Beverley Hills en Los Ángeles, y que tenía que cumplir cuando concluyera la primera condena.

«La noticia de hoy no solo es descorazonadora, sino profundamente injusta. Pero este fallo no disminuye la validez de nuestras experiencias o nuestra verdad», dijeron en un comunicado un grupo de mujeres que se habían unido para denunciar la conducta sexual Weinstein.

«Estamos desoladas por las supervivientes y por quienes encontraron consuelo y catarsis en el veredicto original», reaccionó Tarana Burke, que acuñó la frase Me Too, en 2006, para sensibilizar sobre el abuso y la agresión sexual en la sociedad.