Las detenciones por cruces ilegales en la frontera de Estados Unidos con México se redujeron en un 50% durante enero en comparación con los máximos históricos de diciembre, lo que representa el tercer mes con la menor cantidad de arrestos durante la presidencia de Joe Biden, informaron las autoridades el martes.

Incluso si resulta temporal, el marcado declive es una buena noticia para la Casa Blanca a medida que la inmigración se convierte en uno de los temas más importantes en las elecciones presidenciales de este año. Las encuestas muestran que es la principal preocupación entre muchos de los votantes republicanos en las primarias.

Las cifras se dan a conocer mientras la Cámara de Representantes federal aprobó dar inicio a un proceso de juicio político contra el secretario de Seguridad Nacional Alejandro Mayorkas por su gestión en la frontera.

El descenso estacional y una mayor intensificación en las medidas de control por parte de Estados Unidos y sus aliados han provocado esta fuerte disminución, señaló Troy Miller, comisionado interino de la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza de Estados Unidos (CBP por sus siglas en inglés). Las autoridades estadounidenses han elogiado repetidamente a México por las restricciones que implementó a finales de diciembre.