Activistas denunciaron el viernes cómo los inmigrantes indocumentados son dejados al aire libre bajo altas temperaturas del desierto de Arizona mientras los procesa la Patrulla Fronteriza, lo que califican de clara violación a los derechos humanos.

Isabel García, directora de la Coalición de los Derechos Humanos de Arizona, dijo que los inmigrantes que llegan a la estación de CBP en Ajo están siendo enjaulados.

“Por años hemos documentado la brutalidad de la Patrulla Fronteriza, y este es un ejemplo más del abuso al que son sujetos los migrantes y solicitantes de asilo”, agregó.

A finales de julio el medio investigativo The Intercept publicó varias fotografías que mostraban a inmigrantes encerrados en una estructura tipo “jaula” hecha con paneles de malla metálica bajo temperaturas que superaban los 110 grados Fahrenheit (43 Celsius) afuera de la estación de la Patrulla Fronteriza de Ajo, al oeste de Tucson.

Esta noticia prendió la alarma entre activistas y grupos defensores de los inmigrantes, que desde entonces están vigilando constantemente la estación y aseguran que esta práctica continúa.

“Yo pensé que personas muriendo en el desierto era lo más bárbaro que podíamos ver. Después vimos que nuestros impuestos fueron usados para separar familias, y ahora estamos pagando para que sigan violando los derechos encerrando a estas personas bajo temperaturas insoportables para cualquier ser humano”, dijo García.