Las autoridades de Nueva Jersey desmantelaron dos redes de trata de personas, incluida una que obligaba a menores, algunos de tan sólo 13 años, a tener relaciones sexuales con adultos a cambio de dinero, informó la fiscalía del estado.

Siete personas han sido encausadas como resultado de las operaciones, dijo el fiscal general Matt Platkin. Las acusaciones presentadas en el tribunal superior del estado incluyen detalles estremecedores sobre menores y otras personas que supuestamente fueron obligadas a mantener encuentros sexuales en el condado de Essex, donde se encuentra la ciudad de Newark, y el condado de Cumberland, en el sur del estado.

“No se tolera la explotación de nadie, especialmente de esta manera deshumanizante”, dijo Platkin en un comunicado.

Desde aproximadamente diciembre de 2023 hasta abril de este año, Khailah Meekins, de 21 años, y Donte Barkley, de 28 años, ambos de Newark, se dedicaron a la trata de menores, según la acusación. Platkin dijo que la pareja organizó que dos jóvenes de 15 años y uno de 13 años tuvieran encuentros sexuales a través de una aplicación de teléfono inteligente después de que se publicaran anuncios mostrando a los menores. Luego, las víctimas fueron llevadas a hoteles y hospedajes alquilados a corto plazo donde las personas pagaban para agredirlos sexualmente, dijo el fiscal general.

Douglas Mitchell, abogado de Barkley, dijo que su cliente sostiene su inocencia y se defenderá contra los cargos. El abogado de Meekins no respondió de momento a una solicitud de comentarios.

Un hombre de 24 años de Irvington fue acusado de cargos de agresión sexual, en agosto, como parte del caso de Newark. La fiscalía alega que el hombre pagó por sexo con uno de los menores.

En el condado de Cumberland, Usiel Luna, de 42 años, de Bridgeton, junto con Jose Perez-Lopez, de 40 años, Rosendo Vazquez-Hernandez, de 35 años, y Yerson Puentes-Marquez, de 28 años, todos de Bridgeton, reclutaron personas para trabajar como bailarinas que posteriormente fueron “ofrecidas como sexoservidoras”, dijo Platkin. Desde marzo de 2022 hasta este septiembre, las víctimas fueron llevadas a una casa en Bridgeton, se les dijo que no salieran y fueron obligadas a tener relaciones sexuales con “cientos” de hombres cada semana, según la acusación.

Los abogados de Luna, Perez-Lopez y Vazquez-Hernandez no respondieron hasta el momento a las solicitudes de comentarios el martes.

Las acusaciones se plantearon dos años después de que la fiscalía creara una unidad contra la trata de personas, dijo Platkin.