El gobierno de Estados Unidos no extenderá el ‘parole’ humanitario para los venezolanos, el programa que le permitió a cientos de miles volar a Estados Unidos bajo un programa de patrocinio diseñado para reducir los cruces fronterizos ilegales. Así dijeron funcionarios de la administración Biden al medio CBS News.
Según datos del gobierno, hasta ahora unos 117,000 venezolanos han llegado a Estados Unidos bajo el programa, que se creó en octubre de 2022 y que luego, en enero de 2023, se amplió para incluir a los migrantes de Cuba, Haití y Nicaragua.
No está claro si el ‘parole’ tampoco se extenderá para los ciudadanos de esos países, en caso de que en efecto el gobierno tome la decisión.
Si bien se esperaba que el programa se extendiera, tal como ocurrió con miles de evacuados afganos y refugiados ucranianos, funcionarios del Departamento de Seguridad Nacional dijeron a CBS News que decidieron no extender el programa a los venezolanos.
Aunque el medio cita fuentes del gobierno, nadie de la administración Biden ha confirmado la medida hasta ahora.
Sin ‘parole’, ¿cómo quedará el estatus de los venezolanos?
Los funcionarios también dijeron a CBS News que a los venezolanos con el ‘parole’ humanitario se les entregarán notificaciones instruyéndoles que soliciten otro beneficio migratorio o abandonen el país.
Por ejemplo, los venezolanos pueden ser elegibles para el Estatus de Protección Temporal (TPS) si llegaron antes de julio de 2023. También pueden solicitar asilo, pero ese beneficio solo está disponible para quienes puedan demostrar que huyen de la persecución basada en su religión, raza, opiniones políticas u otros motivos, dice CBS News.
No está claro si algún venezolano con el ‘parole’ humanitario podría ser deportado, en caso de que finalmente las autoridades decidan no extender el programa. Actualmente el gobierno venezolano no está aceptando deportaciones desde Estados Unidos y las relaciones entre ambos países parecen completamente rotas nuevamente.
Tampoco está claro en qué situación quedarían las personas con ‘parole’ sin la posibilidad de trabajar legalmente y sin estar exentos de la deportación, a menos que logren obtener otro estatus.
En caso de que se confirme la medida, tampoco se puede descartar que organizaciones defensoras de derechos humanos de migrantes interpogan alguna demanda, tal como suele ocurrir con los programas de acogida, retrasando la medida durante meses o incluso años.
Con el gobierno de Biden en sus últimos meses, quedaría saber si de llegar a la Casa Blanca, la candidata demócrata Kamala Harris extendería el programa de ‘parole’ humanitario. El expresidente y candidato republicano, Donald Trump, ya ha avisado que lo eliminaria.