Más de 5 millones de migrantes han entrado de forma irregular a Estados Unidos cruzando su frontera sur en los últimos dos años.

Quienes parten de regiones sin conexión por tierra, desde el Caribe hasta países asiáticos o africanos, han encontrado en Nicaragua su plataforma para llegar a la potencia norteamericana.

A Nicaragua pueden acceder en avión, ya que el gobierno del presidente Daniel Ortega exime de visado a las principales nacionalidades que emigran a Estados Unidos.

Ortega, que gobierna de forma autocrática el país junto a su esposa y vicepresidenta Rosario Murillo, obtiene con ello un doble rédito: presiona políticamente a Washington y, sobre todo, ingresa grandes cantidades de efectivo.

Vuelos inusuales

El 4 de junio de 2024, un Boeing 777-200 procedente de Kazajstán con escala en Libia aterrizó en el aeropuerto Augusto C. Sandino de Managua.

Operado por la pequeña aerolínea libia Ghadames Air, el vuelo no aparecía en los registros de la Empresa Administradora de Aeropuertos Nacionales e Internacionales de Nicaragua (EAAI) y solo se podía rastrear en portales especializados en tráfico aéreo.

Fue el tercero de Ghadames Air en menos de un mes y dejó en la capital más de 300 pasajeros, la mayoría de nacionalidad india, reveló el medio de investigación nicaragüense 100% Noticias.

Los tres vuelos a Nicaragua de Ghadames podrían haber pasado desapercibidos, si no fuera porque a finales del año pasado un inusual suceso hizo saltar las alarmas.

El 23 de diciembre de 2023 un avión procedente de Dubái con destino a Managua fue interceptado durante una escala en Vatry (Francia) por una denuncia anónima sobre tráfico de personas.

Llevaba a 303 pasajeros indios que presuntamente intentaban llegar al continente americano a través de Nicaragua para viajar a Estados Unidos. Finalmente 276 fueron devueltos a su país y 27 solicitaron asilo en Francia.

Es, hasta la fecha, el único avión con migrantes del que se tenga constancia de que no logró llegar a Managua.

Desde mayo de 2022 hasta mayo de 2023 aterrizaron en la capital nicaragüense “unos 1,200 vuelos contratados de forma privada para transportar pasajeros que fueron directamente en ruta a la frontera sur con Estados Unidos”, según le dijo a BBC Mundo Manuel Orozco, director del programa de Migración, Remesas y Desarrollo del think tank Diálogo Interamericano.

Orozco estima que más de 300,000 personas accedieron ilegalmente a EE.UU. vía Nicaragua en 2023 y lo que va de 2024, “casi el 10% de toda la migración que ha llegado a la frontera sur”.

El cambio de estrategia

Aunque llaman más la atención los vuelos de lugares lejanos en Asia o África, lo cierto es que la mayoría de migrantes que han usado Nicaragua como primera escala hacia Estados Unidos provenían de países más cercanos como Cuba, Haití o, en menor medida, República Dominicana.

En el caso de Cuba, desde que el gobierno de Ortega concedió entrada libre a sus ciudadanos en 2021, Nicaragua se convirtió en la principal vía de tránsito hacia EE.UU. del mayor éxodo de la historia de la isla (más de medio millón de cubanos se han ido por distintas vías en los últimos dos años y medio).

Como respuesta, el gobierno estadounidense impuso una serie de sanciones desde noviembre de 2023, cuando incluyó en su lista negra a directivos de aerolíneas que participaban en este negocio.

“Es parte de nuestro enfoque integral para abordar la migración irregular y apuntar a propietarios, ejecutivos y altos funcionarios de empresas que brindan transporte por tierra, mar o aire con vuelos chárter específicamente a personas que intentan migrar de manera irregular a Estados Unidos”, indicó a BBC Mundo un portavoz del Departamento de Estado estadounidense.

Haití, por su parte, prohibió el pasado octubre todos los vuelos chárter a Nicaragua.

A todo esto se sumó el programa de visados del gobierno de Estados Unidos que, desde inicios del año pasado, establece cupos para que cubanos, haitianos, venezolanos y nicaragüenses puedan migrar de forma legal.