Temperaturas frígidas envolvieron el sur de Estados Unidos el lunes antes de la llegada de una tormenta invernal que se prevé esparza nieve y hielo en una región que se extiende desde Texas hasta el norte de Florida y que rara vez tiene tal clima, ante lo cual los residentes se apresuraron a aislar tuberías, revisar sistemas de calefacción y abastecerse de suministros de emergencia.
En Texas, los dos aeropuertos de Houston anunciaron que las operaciones de vuelo se suspenderían a partir del martes, en anticipación a condiciones peligrosas debido a una inusual ráfaga de clima invernal severo que apunta a una vasta franja del sur del país, incluida gran parte de la costa norte del Golfo de México.
En otros lugares, la costa este de Estados Unidos lidiaba con una gruesa capa de nieve, mientras la gente desde las llanuras del norte hasta el extremo norte de Maine temblaba bajo temperaturas extremadamente frías debido a una masa de aire del Ártico que provocó un descenso en las temperaturas muy por debajo de lo normal, con sensaciones térmicas peligrosamente frías.
Aproximadamente 40 millones de personas, principalmente en el sur de Estados Unidos, estaban bajo algún tipo de alerta meteorológica, incluidas más de 21 millones bajo una alerta de tormenta invernal, señaló Marc Chenard, meteorólogo del Servicio Meteorológico Nacional en College Park, Maryland. Indicó también que unos 170 millones de personas desde las Montañas Rocosas hasta otros puntos hacia el este se encontraban bajo una alerta extrema o un aviso de clima frío.