La administración Biden está sopesando un plan para utilizar la Base Naval de Guantánamo en el territorio de Cuba, para procesar a los inmigrantes indocumentados de Haití en caso de que ocurra un éxodo masivo de la nación devastada por las pandillas, según CNN.
El gobierno de Haití ha estado bajo estado de emergencia desde que grupos atacaron la prisión más grande del país en Puerto Príncipe a principios de este mes, matando e hiriendo a policías y personal penitenciario y permitiendo que unos 3,500 reclusos escaparan.
Las pandillas controlan ahora el 80% de la capital de Haití, según estimaciones de las Naciones Unidas. El caos ha obligado a decenas de miles de personas a huir de sus hogares, sumándose a los más de 300,000 ya desplazados por la violencia de las pandillas.
La ola de violencia que está sufriendo Haití ha causado preocupación sobre una posible afluencia de inmigrantes indocumentados desde ese país, cuando Estados Unidos ya lidia con niveles récord de encuentros de inmigrantes en la frontera sur durante el gobierno del presidente Biden.
El centro de inmigrantes de Guantánamo se ha usado antes
El plan para utilizar potencialmente la Base Naval de Estados Unidos en la Bahía de Guantánamo como sitio de procesamiento exige ampliar un centro de inmigrantes existente en la base naval, que está separado de la prisión militar donde están detenidos docenas de notorios sospechosos de terrorismo, dijo un funcionario estadounidense a CNN.
En 2010, por ejemplo, el ejército estadounidense preparó el lugar en previsión de que los haitianos huyeran del país azotado por el terremoto.
Pero las discusiones para ampliar la capacidad en el sitio marcan la última señal de creciente preocupación dentro de la administración Biden por la gente que huye de Haití en masa mientras las pandillas atacan las estructuras gubernamentales y el orden social está al borde del colapso.
Los migrantes de Haití probablemente intentarían llegar a Florida por mar en un viaje que puede ser peligroso, y Estados Unidos está sopesando planes para tomar a los interceptados en el mar y transportarlos a Guantánamo para su procesamiento y posible repatriación.
El gobernador de Florida, Ron DeSantis, reveló el miércoles sus planes de enviar más de 250 agentes del orden y docenas de barcos y aviones a los Cayos y las aguas del sur del estado en previsión de una migración masiva desde Haití.
“No podemos permitir que extranjeros ilegales vengan a Florida”, dijo el gobernador DeSantis en un comunicado.