Una oleada de cancelaciones de subvenciones del gobierno estadounidense afectó a investigadores centrados en la salud de personas gays, lesbianas y transgénero la semana pasada, como parte de las medidas que la administración del presidente Donald Trump ha estado tomando contra lo que describe como ciencia impulsada por ideologías.
El gobierno de Estados Unidos finiquitó la semana pasada al menos 68 subvenciones a 46 instituciones, que totalizaban casi 40 millones de dólares cuando fueron otorgadas, según un sitio web gubernamental. Parte del dinero de las subvenciones ya se ha gastado, pero al menos 1,36 millones de dólares en apoyo futuro fueron retirados como resultado de los recortes, aunque sólo había estimaciones disponibles para menos de un tercio de las subvenciones.
La mayoría estaban de alguna manera relacionadas con minorías sexuales, incluyendo investigaciones centradas en la prevención del VIH. Otros estudios cancelados se centraban en el cáncer, el suicidio juvenil y la salud ósea.
Andrew Nixon, portavoz del Departamento de Salud y Servicios Humanos (HHS por sus siglas en inglés), dijo que la dependencia está “dedicada a restaurar nuestras agencias a su tradición de mantener un estándar de oro, basado en evidencia científica”. Las subvenciones fueron otorgadas por los Institutos Nacionales de Salud, una agencia que forma parte del HHS.