Providence – Un hombre de Johnston, condenado y sentenciado en 2006 por delitos graves de agresión que incluyeron el abuso sexual de dos menores, ha sido acusado formalmente por un gran jurado federal por la presunta descarga de material de abuso sexual infantil (MASI), anunció la fiscal federal interina Sara Miron Bloom.
Jonathan P. Graziano, de 41 años, está acusado formalmente de posesión de pornografía infantil.
Documentos judiciales indican que la Oficina de Investigaciones de Seguridad Nacional (HSI) y el Grupo de Trabajo de Delitos contra Niños en Internet (ICAC) de la Policía Estatal de Rhode Island revisaron un informe del Centro Nacional para Niños Desaparecidos y Explotados sobre un usuario que distribuía MASI a través de una aplicación de mensajería. Investigaciones posteriores determinaron que una dirección IP de una dirección de Johnston que Graziano compartió con otros se estaba utilizando para distribuir el material. Un registro judicial de la residencia y de los dispositivos electrónicos resultó en el descubrimiento de cientos de imágenes y videos de MASI en el dispositivo electrónico personal de Jonathan Graziano.
Graziano se encuentra actualmente bajo custodia federal por una denuncia penal presentada el 18 de junio de 2025. Está previsto que comparezca ante el tribunal por la acusación formal el 25 de julio de 2025. Una acusación formal es simplemente una acusación. El acusado se presume inocente hasta que se demuestre su culpabilidad.
El asunto fue investigado por la División de Investigaciones de Seguridad Nacional y el Grupo de Trabajo de Delitos contra Niños en Internet de la Policía Estatal de Rhode Island.
Este caso se presentó como parte del Proyecto Niñez Segura, una iniciativa nacional para combatir la creciente epidemia de explotación y abuso sexual infantil. Liderado por las Fiscalías de los Estados Unidos y la Sección de Explotación y Obscenidad Infantil del Departamento de Justicia, el Proyecto Niñez Segura reúne recursos federales, estatales y locales para localizar, detener y enjuiciar a quienes explotan a menores, así como para identificar y rescatar a las víctimas.