El huracán Ernesto arrojó fuertes lluvias el miércoles sobre Puerto Rico y dejó sin electricidad a casi la mitad de los clientes de la isla, mientras amenaza con transformarse en una tormenta de categoría 3 o superior en su camino a las Bermudas.
El meteoro se ubicaba en mar abierto a unos 1.160 kilómetros (720 millas) al sur-suroeste de las Bermudas, con vientos máximos sostenidos de 130 kilómetros por hora (80 millas por hora) y dirección noroeste a 26 km/h (16 mph).
Se emitió un aviso de huracán para las Bermudas. Las alertas de tormenta tropical fueron suspendidas para Puerto Rico y sus islas exteriores de Vieques y Culebra, al igual que para las Islas Vírgenes de Estados Unidos y las islas Vírgenes Británicas.
“Sé que fue una larga noche escuchando a ese viento aullar”, dijo el gobernador de las Islas Vírgenes Estadounidenses, Albert Bryan Jr., en conferencia de prensa.
Se reportó un apagón en toda la isla de St. Croix, y al menos seis torres de telefonía celular quedaron sin servicio en todo ese territorio estadounidense, dijo Daryl Jaschen, director de manejo de emergencias. Indicó también que se tenía previsto que los aeropuertos en St. Croix y Santo Tomás reabrieran a mediodía.
Las escuelas y las dependencias públicas seguían cerradas en las Islas Vírgenes estadounidenses y en Puerto Rico, donde se reportaron inundaciones en varias áreas, lo cual obligó a las autoridades a cerrar vialidades, algunas de las cuales estaban cubiertas de árboles caídos. Más de 140 vuelos desde y hacia Puerto Rico fueron cancelados.
“Mucha lluvia, mucha lluvia”, dijo en entrevista telefónica Edilberto Romero, alcalde de Culebra. “Tenemos árboles que se han caído en las vías públicas. Hay unos techos que se han ido”.
Las alertas de inundaciones repentinas seguían vigentes el miércoles por la tarde debido a las persistentes lluvias.
Los meteorólogos también advirtieron de fuerte oleaje a lo largo de la costa este de Estados Unidos.
“Eso quiere decir que quienquiera que vaya a la playa, aun si el clima está hermoso y agradable, podría ser peligroso… con esas corrientes de resaca”, dijo Robbie Berg, meteorólogo de coordinación de advertencias del Centro Nacional de Huracanes (NHC, por sus siglas en inglés).
Se pronostican entre 10 y 15 centímetros (4 a 6 pulgadas) de lluvia en las Islas Vírgenes Británicas y en las de Estados Unidos, y de 15 a 20 cm (6 a 8 pulgadas) en Puerto Rico. En áreas aisladas se prevé que habrá hasta 25 cm (10 pulgadas).
Más de 640.000 clientes seguían sin luz en Puerto Rico, y 23 hospitales están operando con generadores, dijo el miércoles el gobernador Pedro Pierluisi. Indicó también que trabajadores evalúan los daños y que es demasiado pronto para saber cuándo se restablecerá la electricidad.
“Estamos tratando de levantar el sistema lo más pronto que podamos”, dijo Juan Saca, presidente de Luma Energy, la empresa que se encarga de la transmisión y distribución de energía en Puerto Rico.