Caravanas de camiones con alimentos ingresaron esta semana al norte de la Franja de Gaza, informaron funcionarios israelíes el miércoles, la primera entrega significativa en un mes en la devastada zona, en donde Naciones Unidas ha advertido que la situación de inanición empeora para cientos de miles de palestinos por la ofensiva israelí.
La creciente alarma en torno a la situación de hambruna en toda Gaza ha desatado llamados de la comunidad internacional para un cese del fuego mientras Estados Unidos, Egipto y Qatar buscan concretar un acuerdo entre Israel y Hamás para una pausa en los combates y la liberación de algunos de los rehenes que capturó Hamás durante su ataque del 7 de octubre.
Los mediadores esperan alcanzar un acuerdo antes del inicio del ramadán, el mes sagrado para los musulmanes que comienza alrededor del 10 de marzo. Pero hasta el momento, ambas partes se han mantenido públicamente lejos en sus posiciones.
A fin de presionar más al primer ministro israelí Benjamin Netanyahu para llegar a un acuerdo, familiares de los rehenes iniciaron el miércoles una marcha de cuatro días desde el sur de Israel hasta Jerusalén para exigir la liberación de sus seres queridos. Algunos de los cerca de 100 cautivos que fueron liberados como parte de una tregua de una semana a finales de noviembre se sumarán a la protesta, la cual se prevé concluirá frente a la residencia oficial de Netanyahu.