El primer ministro israelí Benjamin Netanyahu respondió el sábado a las crecientes solicitudes internacionales para un cese del fuego y dijo que la lucha de Israel para acabar con los combatientes de Hamás, que controla la Franja de Gaza, continuará con “toda su fuerza”.

Un cese del fuego será posible únicamente si todos los 239 rehenes que fueron tomados por los combatientes y llevados a Gaza son liberados, dijo Netanyahu en un discurso televisado.

El mandatario israelí también insistió en que después de la guerra, Gaza será desmilitarizada e Israel tomará el control de la seguridad del territorio. Esta postura parece contradecir los escenarios de posguerra planteados por el aliado más cercano de Israel, Estados Unidos, que ha manifestado su oposición a que vuelva a ocupar el territorio.

Cuando le preguntaron qué quería decir con el control de seguridad, Netanyahu dijo que las fuerzas israelíes deben poder ingresar a Gaza cuando sea necesario para ir detrás de combatientes.