El presidente Joe Biden indicó que viajaría a Baltimore la semana que viene mientras las autoridades se apresuran por gestionar las consecuencias que dejó el colapso del puente Francis Scott Key tras el choque de un buque carguero.

El demócrata se unirá al gobernador de Maryland, Wes Moore, un aliado político cercano, en su visita a la ciudad una semana después que un carguero chocó contra un poste del puente el martes temprano, hundiendo el puente en el agua.

Asimismo, se recuperó los cuerpos de dos empleados de la construcción que estaban arreglando huecos en el puente y se presume que otros cuatro más perdieron la vida.

El siniestro ha detenido por completo el transporte marítimo que entra y sale del puerto de Baltimore. El gobierno federal ha movilizado a funcionarios de numerosas agencias, incluido el Departamento de Transporte, la Guardia Costera, el Cuerpo de Ingenieros del Ejército y la Junta Nacional de Seguridad en el Transporte, para hacer las respectivas averiguaciones y empezar la tarea de remoción de escombros y restaurar el tráfico por medio del canal de envío.

El jueves, la Administración de Biden anunció que proporcionará $60 millones de dólares en ayuda de emergencia de “liberación rápida” que describió como “un pago inicial para cubrir los costos iniciales”. El mandatario afirmó que el gobierno federal “pagará el costo total de la reconstrucción” del puente, informó The New York Times.

La visita del ejecutivo estadounidense se produce cuando los funcionarios estatales y federales han dado la advertencia sobre las posibles dificultades económicas que el cierre del puerto podría tener tanto para los empleados portuarios como para la economía de la región.

Los legisladores de Maryland dijeron que están redactando una legislación de emergencia para ayudar a proteger contra la pérdida de salarios de cerca de 15,000 empleados que podrían verse afectados directa o indirectamente.

La mayoría de los afectados son también trabajadores sindicalizados, cuya causa Biden ha asumido frecuentemente como un feroz defensor del trabajo organizado.

El Departamento de Transporte convocó el jueves una reunión con administradores portuarios, líderes laborales y grupos industriales para discutir posibles interrupciones en la cadena de suministros y planear cómo redirigir el tráfico mientras se suspenden los envíos dentro y fuera de Baltimore.