Providence – A raíz del incendio del miércoles en el depósito de chatarra de Rhode Island Recycled Metals en la Avenida Allens, un juez otorgó una orden de restricción temporal contra la empresa.

El juez Brian Stern citó el negocio como una “molestia pública” y permanecerá cerrado hasta que pueda demostrar que está equipado para prevenir futuros incendios.

Funcionarios, incluido el alcalde Brett Smiley, miembros del Concejo Municipal de Providence y de la Asamblea General de Rhode Island, y el Fiscal General Peter Neronha, han intentado cerrar el patio varias veces anteriormente. El fiscal general Peter Neronha dijo que su oficina aprecia que el juez reconozca el “peligro inherente” de permitir que el depósito de chatarra siga funcionando como hasta ahora.

“La decisión del tribunal de aceptar nuestra moción, cerrando así las operaciones en el futuro previsible, garantizará que South Providence no tenga que seguir soportando la carga de importantes riesgos para la salud mientras esta empresa determina si puede operar de forma segura”, Neronha dicho. “Espero con ansias el informe del Auxiliar Judicial y trabajaremos diligentemente para asegurarnos de que la negligencia del RIRM no continúe dañando a South Providence”.

El alcalde Smiley dijo que el cierre es un “paso crucial” para la salud y la seguridad de la ciudad. “Seguimos comprometidos a responsabilizar a Rhode Island Recycled Metals y a garantizar que cualquier operación en este lugar cumpla con todas las regulaciones municipales y de seguridad necesarias y esperamos que nuestros socios en el estado los hagan responsables de los impactos ambientales en nuestra comunidad”, dijo. “Continuaremos trabajando con socios estatales para proteger nuestros vecindarios y garantizar que todas las empresas operen de manera segura y responsable”.

El director del Departamento de Gestión Ambiental de Rhode Island, Terrence Gray, dijo que la nueva orden fue un “esfuerzo de equipo” entre RIDEM y la Oficina del Fiscal General.