La justicia boliviana decidió el martes enviar a prisión preventiva por 30 días a la jueza que anuló una orden de detención contra el expresidente de Bolivia Evo Morales, en un caso de presunto abuso a una menor cuando era mandatario en 2016.

La jueza Lilian Moreno deberá cumplir prisión preventiva en la cárcel de Palmasola, en la región oriental de Santa Cruz, tras ser imputada por la fiscalía por los delitos de desobediencia y presunto prevaricato por anular la orden de captura contra Morales.

“El Ministerio Público ha señalado riesgo de fuga”, declaró Nicolás Osinaga, abogado de la jueza, tras la conclusión de la audiencia. Calificó la resolución como una decisión arbitraria.

El lunes Moreno fue detenida en la región oriental de Santa Cruz. La jueza era buscada después de emitir un fallo que favorecía a Morales ya que anulaba la orden de captura en su contra. Tras la polémica, las autoridades judiciales y de gobierno han salido a explicar que la orden de aprehensión y el caso siguen vigente contra Morales (2006-2019).

En su cuenta de X, el expresidente denunció que la jueza fue “ilegalmente” detenida con el fin de dar un “claro mensaje de intimidación, coacción y persecución para todos los jueces… que no cumplan con las órdenes ilegales y autoritarias dictadas por del gobierno en el marco de la guerra judicial accionada en contra de mi candidatura”.