El gobierno del presidente estadounidense Donald Trump está llevando a cabo una revisión a nivel nacional de 450.000 niños migrantes que cruzaron la frontera con México sin sus padres durante el mandato del presidente Joe Biden, en la cual participan varias agencias.

Los funcionarios de Trump dicen que quieren localizar a esos niños y garantizar su seguridad. Muchos de los infantes llegaron a Estados Unidos durante incrementos en el arribo de migrantes en los últimos años y luego fueron colocados en hogares con patrocinadores adultos, generalmente padres, familiares o amigos de la familia.

Los defensores de los migrantes se muestran escépticos ante las tácticas del gobierno republicano, que incluyen el envío de agentes de Seguridad Nacional y del FBI para visitar a los niños. El enfoque de tolerancia cero de Trump hacia los inmigrantes que se encuentran ilegalmente en Estados Unidos, el cual ha derivado en que niños pequeños sean enviados al extranjero, ha generado una profunda sospecha de que su gobierno podría usar la revisión para deportar a cualquier patrocinador o niño que no esté viviendo legalmente en el país.

Funcionarios de Trump dicen que los patrocinadores adultos que acogieron a niños migrantes no siempre fueron investigados debidamente, dejando a algunos en riesgo de ser explotados. El Departamento de Justicia ha acusado a un hombre de atraer a una niña de 14 años para viajar desde Guatemala a Estados Unidos, y luego afirmar falsamente que era su hermana con el fin de obtener la custodia y ser su patrocinador.

Funcionarios de Trump realizarán verificaciones domiciliarias y entrevistas

Los funcionarios de Trump esperan que surjan más patrocinadores problemáticos a medida que el gobierno lleva a cabo visitas domiciliarias y entrevistas para verificar casos en los que se han presentado quejas, los cuales son aproximadamente 65.000 desde 2023. Este año, unos 450 casos con quejas han sido remitidos a agentes policiales federales, según un alto funcionario del Departamento de Salud y Servicios Humanos (HHS, por sus siglas en inglés) que no estaba autorizado a declarar públicamente sobre los detalles de la revisión y habló a condición de guardar el anonimato.

“Estamos revisando cada informe, cada detalle, porque proteger a los niños no es opcional”, declaró el HHS en una publicación en la red social X. El secretario de Salud, Robert F. Kennedy Jr., pareció hacer referencia a la revisión durante una reunión del gabinete con Trump el miércoles, diciendo que su agencia estaba tratando de “encontrar a los niños”.

Durante al menos una década, el gobierno federal ha permitido que adultos soliciten acoger a niños migrantes que cruzaron la frontera sin un padre o tutor legal. Sin embargo, el programa estuvo lleno de problemas durante los años del gobierno demócrata de Biden, ya que las autoridades pasaron apuros para procesar una afluencia de miles de niños. Funcionarios federales no realizaron verificaciones de antecedentes ni de domicilio en algunos casos antes de colocar a los niños con patrocinadores. En otros casos, los patrocinadores proporcionaron identificaciones claramente falsas, según concluyó un informe de un organismo de control federal el año pasado.

Después de que se emitió ese informe, el gobierno de Biden indicó que ya había trabajado para mejorar los problemas a través de “capacitación, monitoreo, tecnología y evaluación”.

Miles de niños fueron colocados con patrocinadores legítimos

Pero miles de niños también fueron colocados con familias legítimas, algunas de las cuales ahora temen verse inmersas en la revisión del gobierno de Trump y ser blanco de deportación, observó Mary Miller Flowers, directora de políticas del Young Center for Immigrant Children’s Rights, un grupo activista por los derechos de la infancia.

El centro labora con algunos de los niños más vulnerables que cruzan la frontera. Flowers indicó que muchos pequeños han sido colocados con sus padres, abuelos, primos, tías o tíos.

En algunos casos, los niños podrían llegar a la frontera por separado de sus padres que ya viven en Estados Unidos y reunirse con ellos a través del programa.

“Ahora se tiene una situación en la que el gobierno está verificando el bienestar de los niños y encontrándose con sus padres indocumentados y deportando a sus padres”, señaló Flowers. “No sé qué tiene eso de bueno para los niños”.

El gobierno ha tomado la custodia de 100 niños

Hasta ahora, aproximadamente 100 niños en los últimos dos meses han sido retirados de sus patrocinadores y devueltos a la custodia del gobierno federal, generalmente en refugios privados, según el funcionario del departamento de salud.

En Cleveland, fiscales federales alegan que un hombre, que vivía en Estados Unidos ilegalmente, organizó que la niña de 14 años obtuviera una copia del certificado de nacimiento de su hermana y luego coordinó su viaje desde Guatemala a territorio estadounidense. Dijo ser su hermano, pero no se realizaron pruebas de huellas dactilares ni de ADN para verificar su afirmación, según un alto funcionario del Departamento de Justicia que no podía declarar públicamente sobre los detalles del caso en curso y habló a condición de guardar el anonimato.

El hombre se declaró culpable de agresión sexual a la niña en un tribunal estatal de Ohio en 2024 y fue sentenciado a ocho años de prisión, indicó el funcionario. Ahora el individuo enfrenta cargos federales, los cuales incluyen inducir un ingreso ilegal para obtener ganancias financieras y robo de identidad agravado. Los abogados del hombre declinaron hacer comentarios.

Dentro de la revisión, el gobierno de Trump está trabajando para identificar la ubicación de cada niño que ha sido colocado con un patrocinador, según el funcionario del Departamento de Justicia. Los investigadores están revisando solicitudes de patrocinio sospechosas, como los así llamados “super patrocinadores”, que han alegado tener relaciones familiares con, en algunos casos, más de una docena de niños no acompañados, dijo el funcionario.

Han surgido videos e informes de agentes policiales armados que se presentan para realizar verificaciones de bienestar en las puertas de menores no acompañados y sus patrocinadores en todo el país.

En una declaración enviada por correo electrónico, el FBI indicó que está llevando a cabo verificaciones de bienestar “a nivel nacional” porque “proteger a los niños es una misión crucial”, y agregó que seguirá trabajando con sus “socios federales, estatales y locales para asegurar su seguridad y bienestar”.

Pero algunos activistas han planteado dudas de que los niños se animarán a declarar abusos u otras preocupaciones sobre sus patrocinadores a agentes policiales armados de agencias federales que simultáneamente están ejecutando campañas de deportación masiva.