Al tiempo que se escuchaban disparos en los pasillos y aulas de la escuela primaria Robb en Uvalde, Texas, una de las profesoras aterrorizadas que llamó frenéticamente al 911 describió “muchos, muchísimos disparos”, y otra sollozaba al teléfono cuando un despachador la instaba a guardar silencio.
”¡Dense prisa, dense prisa, dense prisa, dense prisa!” gritó la primera profesora antes de colgar.
Esas llamadas, junto con imágenes de cámaras corporales y videos de vigilancia, se incluyeron en una colección masiva de grabaciones de audio y video publicadas por las autoridades de la ciudad de Uvalde el sábado luego de una prolongada lucha legal. The Associated Press y otras organizaciones de noticias entablaron una demanda después que las autoridades en un inicio se negaron a divulgar públicamente la información de uno de los peores tiroteos escolares en la historia de Estados Unidos.
Una de las primeras llamadas que recibió la policía la mañana del 24 de mayo de 2022 provino de una mujer que llamó al 911 para reportar que una camioneta tipo pickup se había estrellado contra una zanja y que el conductor había entrado corriendo a las instalaciones de la escuela.