Manifestantes rivales se enfrentaron el miércoles en la Universidad de California en Los Ángeles (UCLA) a puñetazos, empujones, patadas y usando palos para golpearse entre sí. Horas antes, la policía irrumpió en un edificio de la Universidad de Columbia tomado por manifestantes propalestinos y disolvieron una protesta que había paralizado a la escuela e inspirado otras más.

Tras un par de horas de escaramuzas entre manifestantes propalestinos y proisraelíes en la UCLA, policías con cascos y escudos formaron vallas y separaron lentamente a los grupos. Esto calmó la violencia y el lugar estaba tranquilo mientras amanecía. La UCLA canceló clases el miércoles e instó a la gente a evitar el área donde ocurrieron los enfrentamientos.

“Debido a la angustia causada por la violencia que tuvo lugar en Royce Quad anoche y temprano esta mañana, todas las clases están canceladas hoy”, dijo la universidad en un comunicado.

Los estudiantes instalaron campamentos en las universidades para pedir a las instituciones que dejen de hacer negocios con Israel o empresas que apoyan la guerra en Gaza. El movimiento de protesta estudiantil se ha extendido por todo el país como ningún otro en el siglo XXI. La irrupción de la policía en algunos campus hizo recordar el movimiento de protesta en la época de la guerra de Vietnam, que fue mucho más generalizado.