Ahora que Pablo Lyle fue trasladado a una nueva prisión antes de ir a la definitiva para iniciar su condena de cinco años, sus seguidores saben lo importante que es seguir apoyándolo a través de la página que su familia creó a raíz de su sentencia.

Según se ha dado a conocer, la cifra de $100,000 mil dólares que se tenía como objetivo fue rebasada y hasta el momento se han logrado recaudar $103,362. Por esta razón, los seres queridos del actor emitieron un mensaje para agradecer el apoyo recibido.

«Queremos agradecer a cada una de las personas que generosamente han donado a esta causa. Agradecemos todos los mensajes, muestras de cariño y apoyo para Pablo y su familia. Aún queda un camino por recorrer, es por eso que hemos decidido dejar abierto este espacio de recaudación para quienes sientan en su corazón el llamado a ayudar”, se lee en el escrito del sitio web.

Según se sabe, los abogados de Pablo están haciendo todo lo posible para presentar una apelación con la que se busca reducir su sentencia; mientras tanto, se espera que siga habiendo donaciones para cubrir todos los gastos legales.

Cartas al juez: “Hola, soy Aranza, hija de Pablo Lyle…”

Pablo Lyle recibió una sentencia de cinco años tras las rejas y ocho de libertad condicional por homicidio involuntario y tras la reaparición de su esposa en redes sociales, ahora se sabe que sus hijos tampoco la están pasando bien.

A través de “Ventaneando” se dieron a conocer unas cartas que Aranza y Mauro hicieron con dedicatoria a la jueza Marisa Tinkler Méndez, quien llevó el juicio del actor desde el principio y quien dio el veredicto en la audiencia final el pasado 3 de febrero.

“Hola, soy Aranza, hija de Pablo Lyle, voy en sexto de primaria y tengo 12 años. Mi papá es buena persona, lo quiero mucho, y también es amable, para mí no se merece estar allá, me gustaría que esté conmigo, pero eso no importa, lo conozco desde que tengo 4 años y no miento cuando digo que es una persona amable, cariñosa, agradecida y valiente. Me gustaría ser tan valiente como él“, se lee en la masiva de la primogénita.

Por su parte, el menor de los retoños expresó “Mi nombre es Mauro, tengo 8 años y soy hijo de Pablo Lyle. Yo estuve el día más importante de mi vida, el día que papi no volvió a Mazatlán. Lo extraño mucho, yo sé que mi papi no se atrevería a lastimar a alguien, yo estaba chiquito. Mi papá es divertido y cariñoso, es muy buena onda, lo admiro mucho. Mi papi ha sido muy valiente”.