El exvicepresidente Mike Pence abandonó el sábado su campaña por la candidatura presidencial republicana debido a las dificultades para recaudar fondos y avanzar en las encuestas.
“Después de mucho orar y deliberar, he decidido suspender mi campaña por la presidencia a partir de hoy”, dijo Pence en una reunión de la Coalición Judía Republicana en Las Vegas. “Siempre supimos que sería una batalla cuesta arriba, pero no tengo remordimientos”.
Pence es el primer candidato importante que abandona una contienda que ha estado dominada por su antiguo jefe convertido en rival, Donald Trump. Sus problemas ponen de manifiesto cuánto se ha transformado el partido con Trump. Un exvicepresidente sería un contendiente poderoso en cualquier primaria, pero Pence no ha conseguido una base de apoyo.
En su discurso, Pence no dio su apoyo a otro precandidato, pero empleó el lenguaje que ha usado hasta ahora para criticar a Trump.
























