La policía federal brasileña arrestó el martes a cinco oficiales acusados de un complot golpista que incluía planes para derrocar al gobierno tras las elecciones de 2022 y asesinar al entonces presidente electo Luiz Inácio Lula da Silva, informaron las autoridades.
Los cinco también planearon matar al compañero de fórmula de Lula, Geraldo Alckmin, y al juez del Supremo Tribunal Federal (STF), Alexandre de Moraes. Cuatro de los arrestados son militares de operaciones especiales, uno de ellos un general de brigada retirado, y un agente de la policía federal.
La policía dijo que también se ejecutaron tres órdenes de allanamiento junto con otras medidas, incluyendo la incautación de los pasaportes de los sospechosos y la prohibición de que estos se comuniquen entre sí. No estaba claro cuándo se presentarían oficialmente cargos contra los cinco sospechosos.
“El objetivo era impedir la toma de posesión del gobierno legítimamente electo y socavar el libre ejercicio de la democracia y la autoridad del poder judicial de Brasil”, indicó De Moraes en la orden.
“Estas acciones, que alcanzaron su punto máximo entre noviembre y diciembre de 2022, formaban parte de un plan más amplio para llevar a cabo un golpe de Estado”, añadió.